domingo, 20 de julio de 2014

El Amanecer del Planeta de los Simios


¡Simio no mata a Simio! Capítulo 2 versículo 29

La larga saga de "El Planeta de los Simios" desde que el astronauta Taylor (Charlton Heston) aterrizara en un planeta habitado por estos seres, ya por entonces más inteligentes que los humanos, pasando por series de TV, dibujos animados y una larga lista de franquicias de la marca: el origen, el regreso, la rebelión... hasta llegar a éste amanecer, ha llenado siempre las salas. Algo de mérito hay que reconocerle al creador de la novela Pierre Boulle, un francés autor también de "El puente sobre el río Kwai". Dos grandes éxitos en la gran pantalla nacidos de los textos de este aventurero francés.

Recordar que la novela nace en los años 60 en pleno movimiento hippy y la primera película es del 68. Revoluciones, el positivismo científico que se enfrenta a los conceptos de vida natural, entendimiento con el entorno, el pacifismo y los primeros movimientos de conservación de animales. En el fondo esta novela lanza un reto al ser humano que ya ha empezado a devastar todo lo que le rodea.
Para centrarnos en esta última apuesta dirigida por  Matt Reeves, se llega a lo más alto del entendimiento entre cine, arte y tecnología. Decenas de actores casi desnudos conectados por sensores a terminales informáticos que recogen sus movimientos, sus gestos, sus guiños y los convierten en simios totalmente reales y si no, que le pregunten a Andy Serkis (César) que ya fue Gollum y sabe de interpretar conectado a cables.
Efectos especiales de mucha calidad, yo me quedo alucinado mirando la cara de Cesar, cómo gesticula, o los cabreos y la cara de mala leche de Kova, el mono malo y la cara de bonachón de Maurice…

Lo mejor es que no sólo hay efectos, hay mucho más,  hay historias paralelas que deberían ser sólo humanas pero que ya, en su estado evolucionado, forman parte también de los simios que sienten, que quieren vivir en paz, disfrutar del entorno y de la familia y tener cubiertas sus necesidades más primarias.
La acción está asegurada, pero ojo, a un ritmo pausado, que César es de los que se piensa mucho las cosas. Los giros impulsivos salvajes también aparecen, los sustos, el no saber qué va a pasar ante la reacción de algunos simios y algunos humanos. Dos bandos que al final, como en la vida real, acaban enfrentándose sin llegar a solucionar las cosas un peldaño antes. La escalada de la violencia, la venganza, el engaño y la mentira o la traición, como en los grandes clásicos, aparece para desarrollar el hilo narrativo en una película de aventuras con toque épico, fiel a la saga, entretenida e impactante que no va a decepcionar.
Claramente son una especie evolucionada porque comenten exactamente los mismos errores que los humanos.

Tendrá una buena entrada en estos meses de verano esta película que comenzó perteneciendo al género de ciencia ficción y se ha convertido en una serie tipo “Cuéntame” que avanza con el tiempo y que no puedes saltarte.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención es el uso del lenguaje. Ya nos tenían acostumbrados a verlos que hablan y dominan el lenguaje humano y el de gestos, pero aquí, la comunicación verbal toma una dimensión especial y me gusta como se trata desde el primer ¡FUERA!
Hay pues, guión bien llevado, emoción y transmisión de valores de los que llenan las salas de padres con hijos, novios con novias, primos...

Mis peros :  Estos simios son demasiado responsables cuando en el fondo todos sabemos, tal y como quedó demostrado en el "Proyecto NIM", los monos son unos hedonistas de la leche. Un poco cansina la moralina del modelo occidental católico que basa el objetivo de la vida en la familia nuclear. La mujer en casa pariendo, el hombre luchando y cazando, no están tan evolucionados, ni siquiera ahora, en la era del nuevo Papa Paco, que seguro estaría dispuesto a consentir chimpancés con otras tendencias y familias monoparentales.

El detalle: Los collares y diademas de las chimpancés hembras, ¿pero de dónde han sacado eso? ¿De qué mercadillo? Son horribles, ¿O no?

jueves, 17 de julio de 2014

Una noche en el viejo Mexico

¡No pases tu vida solo respirando!

Joel Coen, Ethan Coen,  y a partir de ahora, Emilio Aragón Alvárez con esta película de personajes, de historias, de viajes vitales sin importar el destino porque el destino son solo sueños sin cumplir y por los que luchar. Una película que habla desde dentro y novela las escenas. El decorado, ese polvo constante de la baja California que casi te entra en los ojos y seca la garganta. Menos mal que hay Tequila y cerveza y por supuesto La noche de los muertos, las calles adornadas con luces pobres de colores de un pueblo perdido cerca de la frontera.
Un lugar que a veces es paraíso y otras infierno o tumba por donde ruedan la vida Robert Duval, (Red Bovie), el señor mayor que aún tiene agallas para seguir luchando cuando se lo han quitado todo,  su inesperado nieto Jeremy Irvine el de War Horse (Gally Bovie) y su sombrero y  Angie Cepeda ya conocida del público español, la "Gilda" de un escenario cutre, violento, machista y agresivo ante el que se desenvuelve sin miedos ni complejos hasta que se harta de enseñar las tetas. Tres personajes que buscan sus sueños y crecen durante el recorrido. Sueños por los que deben luchar a costa incluso de su propia sangre.
Entre medias, por encima o por donde quieran ustedes Luis Tosar el narcotraficante que da la talla donde tenga que aparecer.  Matones, vengadores, sicarios, aventura, tensión, solidaridad, la llamada de la sangre y la venganza, el amor, la pasión, la ternura y las cosas que a todos nos llegan casi sin querer.

El guionista Bill Wittliff Premio Award en Estados Unido y guionista de “La Tormenta perfecta” o “Barbarosa”  también ambientada en el entorno Mejicano,  se ha unido a un director irresistiblemente inquieto y curioso, un todo terreno este  Emilio Aragón Álvarez capaz de lanzarse a aventuras arriesgadas. 

La película mueve la rueda de un destino que une a diferentes personajes, buenos y malos, vitales y dañinos, capaces de lo peor y lo mejor. 
Son todos la vida misma que reacciona en un segundo, sin pensar. Con un comienzo que ya promete y anuncia un camino abierto donde cabe todo. Unos faros de un coche que rompen la oscuridad y la intermitencia del cartel de un Motel, una bolsa, droga y un disparo. Ya presagia una buena trayectoria de lo que pueda ocurrir, pero sorprenden cómo van uniéndose los roles y con qué naturalidad y credibilidad se desenvuelven.
Una película buena, muy buena.

Por cierto una estupenda banda sonora, cuidados en los detalles y para mí la que debería haber ganado los premios Goya, la verdad.


El detalle: La pelea en el cementerio y “la mano de Dios” metáfora del castigo divino. ¿O no?

“Ahora a por Pájaros de papel”

sábado, 12 de julio de 2014

La vida secreta de Walter Mitty

O cómo completar un perfil
Una película dedicada a toda esa gente que hace realidad sus sueños, que consigue que las cosas en la vida sean posibles. Un héroe del día a día Walter Mitty (Ben Stiller). Un solitario habitante de la nada, de la vida sin expectativas que se lanza a enviar un pequeño emoticón vía internet en una web de contactos a la chica de sus sueños y ahí comienza todo.
La vida son fotogramas como los del archivo para el que Walter trabaja en la revista Life. Pequeños negativos que una vez revelados pueden mostrarnos una vida más interesante. Una vida por la que luchar o imaginar o soñar. 
El poder de internet y el terreno movedizo entre la realidad y la mentira de los sueños y lo que deseamos. 
No es fácil encontrar la persona que queremos, el amor es un complejo algoritmo de encuentros y desencuentros casuales llenos de ceros y unos.

La vida real cruda con despidos, con soledad y aislamiento con jefes vomitivos y vidas anodinas que buscan otras vidas.
De pronto, la magia, el destino,  la capacidad de fantasear, esa oportunidad que nos pasa a todos por delante, al menor una vez en la vida, sentirse capaz de hacer y responder a preguntas como: ¿Y por qué no hago esto y lo otro para salir de esta situación? 
El personaje se lanza, se atreve a vivir otras vidas, a dejar que se le “vaya la olla”.
Un nuevo Peter Pan urbano que por fin, dice lo que hasta ese momento callaba. Y además una intriga, una aventura, algo que contar. Una foto, la quinta esencia que necesita la revista Life para no cerrar. Una pista, un hilo del que tirar y buscar otras vidas,  personajes de ficción, alguien que no somos pero podemos ser, entre ida e ida de olla.
Hay lugar para todo en esta película: para lo humano, para la niñez tardía, para viajar en skateboard o estar a punto de morir entre cenizas de volcanes. Espacio para luchar contra un tiburón con un maletín o subir al Himalaya y hacer la mudanza de un piano. 

Por fin  coge la vida, la agarra y a viajar detrás de Sean O´Conell (Son Pean) un héroe de verdad, el fotógrafo del que debe salir la foto de la última portada.
Una película basada en un relato corto de James Thurberes. Una película muy cuidada,  romántica y tierna, conmovedora, con repuntes de revolución sencilla y cosas que nos pasan a todos.
Destacar los magníficos escenarios de Islandia y la música de Theodore Shapiro así como el conjunto de actores, aunque la historia puede más, mucho más que ellos mismos.
¡En resumen me gustó mazo!

El detalle: Escena donde él corre delante de las impactantes portadas de Life. Emocionante y fuera el lema de la revista: ”To See The world (Para ver el mundo)”.Una metáfora de toda la película. ¿O no?

domingo, 1 de junio de 2014

Ocho apellidos vascos

Un quiero y no puedo “Mi arma”
Digo yo que para qué esforzarse más ¿no? Poco que decir de una película que dice poco. “Quid pro Quo” que decía la locución latina.
Un juego sencillo, demasiado sencillo, sin ninguna pretensión, sin esfuerzo y donde lo que más destaca son los maravillosos paisajes de una tierra donde la naturaleza llena más que la propia historia. Zarauz, Getaria, Zumaia, etc. 
Una historia, por otro lado, que nadie se cree, de chiste fácil y juego de palabras donde intenta reírse con todos y desdramatizar los tópicos del país. Menos mal, que la tarea de divertir se encargó a Dani Rovira, si no… 
Bien por Karra Elejalde, puede hacer cualquier cosa, le va en el oficio. De los demás no tengo mucho qué decir.
Puedes salir a comprar más palomitas, meter mano a tu chica, incluso hablar con el de al lado que no te perderás nada de una trama que no existe cuya única masa está en juegos de palabras del “analfabeto” de Dani Rovira, cómo no andaluz (esto duele).

Una película producto Telecinco, faltaba Belén Esteban o los hermanos Matamoros. Eso sí como la primera ha sido éxito en venta con su libro esta película ha sido éxito de taquilla.
Somos así qué le vamos a hacer, y no pidan más. ¡Sálvame de Luxe!

El detalle: Él toque de neorrealismo italiano (en color)  en la escena de Clara Lago corriendo vestida de novia por el pueblo. Lo mejor ¿O no?

miércoles, 21 de mayo de 2014

Sobran las palabras

Pequeñas lecciones de vida
-Me gustan tus remos (Eva)
-Me gusta tu culo (Albert)

Mira que yo…, lo de las comedias románticas… como que no. No obstante, por hacer un homenaje al recientemente fallecido y admirado James Gandolfini, me lanzo con esta película y en los primeros minutos me engancha.
En cinco minutos tienes un retrato psicológico, ambiental y personal de los protagonistas. La masajista Eva, simpática, aunque “cansada de hacerse la graciosa”, divorciada, mama metomentodo de chica universitaria (americana claro, que son universitarios diferentes), atrevida, atractiva… Atrapa.
En breve aparece el otro protagonista Albert, magistral Gandolfini, tierno, enorme oso de peluche, también divorciado, con hija universitaria y muchas coincidencias con Eva. Casi están hechos el uno para el otro desde que se encuentran en una fiesta.

A partir de aquí, todo evoluciona fácilmente, sugerente, directo, claro, con humor y diálogos rápidos, ágiles,  escenas que se engarza bajo las miradas humanas de cada personaje. Tiene la rapidez de las series televisivas, su directora y guionista Nicole Holofcener sabe mucho de esto. No en vano ya tuvo éxito con “Sexo en Nueva York”, “Iluminada”, etc.

El nudo nace de esas coincidencias  insospechadas que  nos ofrece la vida y que no voy a revelar. En este punto la película toma un nuevo rumbo, más intimista, personal y emotivo sin faltar el humor, las meteduras de pata, el distanciamiento y la reconciliación.
Retratos de personas más que maduras, con experiencias, charlas postsexo sin cigarrito, momentos de perdedores, aislados en la metrópilis en pleno cambio vital y una escalera que Eva sube repetidamente, metáfora quizás del mito de “Sísifo” que todos saludamos cada día.


El detalle: Esa horrible buena educación de todos los personajes me resulta muy pedante, falta un toque latino en esos enfados, en esas emociones casi autocensuradas, falta pasión ¿O no?

domingo, 18 de mayo de 2014

Doce años de esclavitud

El violinista en la plantación 

¿Quién soy yo para decir que no a los premios otorgados?
Los estadounidenses aún tienen mala conciencia porque si no, tampoco se explica tanto encumbramiento. Tras Django Desencadenado uno se enfrenta a estas temáticas con otra mirada.

La película correcta, esclavos maltratados en escenas durísimas pero ya vistas cientos de veces, caña de azúcar, ríos y manglares y un fondo de canto de chicharras muy bien conseguido que me llamó la atención.

Se aparta de lo corriente por el carácter intelectual del protagonista, por otra parte, un personaje  con muchos “casi” en la historia: un casi esclavo a la antigua usanza de películas con olor a barco de vapor, un casi héroe, un casi hombre libre, un casi revolucionario… hasta que llega la escena de la horca o de los latigazos a la joven Patsey, ¡tremendas! Interpretada magistralmente por Lupita Nyong'o, merecidísima ganadora del Óscar a la mejor actriz de reparto.

Lo más cuando ella tiene plano, pues es la verdadera narración de los excesos y la incongruencia de la esclavitud de unos jodidos blancos que aún siguen teniendo descendientes tristemente. Por cierto, habrá que investigar y culturizarse un poco mirando por internet las otras facetas artísticas del director Steve McQueen (no el de la gran evasión) en su faceta de fotógrafo y escultor.

En definitiva nada nuevo que no hayamos visto en Mandingo (1975), El color púrpura (1985) o la estupenda serie Raíces (1977), entre otras.

El detalle: La aparición de la esperanza blanca encarnada por Brad Pitt, productor también de la película, vestido de blanco, carpintero, parece salido de un belén. ¿O no?

martes, 6 de mayo de 2014

Elektra Luxx

¿Qué clase de persona eres tú?

Película del 2010 pero que yo veo ahora. Un look de los 80 más locos, Almodovar que pasa por allí y deja  la estética, el rojo chillón pintalabios, el latex y la mirada.. ¡Ah y sale en los créditos!
El porno más allá del porno, la vida humana de una diosa del sexo retirada que se hace terrenal, se queda embarazada y se gana la vida dando clases de sexología.

La “medio trama” la pone un personaje entre cohibido e ingenuo recién salido del confesionario, con ganas de venganza sentimental y que curiosamente se ha tirado al ex y papá del hijo de la actriz porno a la que pide ayuda para acometer su venganza. A partir de esta tontería se inician tres historias que son las tres patas de un banco cojo.

Un bloguero iniciático del mundo del porno Joseph Gordon-Levitt el Robin del Batman como caballero oscuro que sirve de hilo conductor y narrador como Carlos Hipólito en “Cuéntame”
Una medio historia romántica entre dos amigas que se declaran y descubren su amor lésbico y claro la historia de Elektra Luxx  que pasa del sexo rápido con un detective, a la redención tras una visión mariana.

Final feliz, ella una escritora de éxito y todos felices incluso Sebastián Rodríguez su director, supongo.


El detalle: En parecidos razonables la actriz principal Carla Giugino es “clavá” a Melanie Griffith  ¿O no?
Por cierto la segunda esposa oficial y la primera esposa en la trilogía de Spy Kids.





jueves, 1 de mayo de 2014

El Capital

El Robin Hood de los ricos

Hacía tiempo que no pasaba por aquí y es que, no ha habido hueco para ver videos y hablar de ellos además, me enganché a Braking Bad, los que la han visto me entenderán. No queda mas espacio para tu visionado si estás viendo Braking Bad. (Lo mejor de lo mejor).

Anoche, en cambio, tocó una película de Costa Gavras, El Capital, (2012) y tal y como indica el título, no se trata de otra cosa: dinero, más dinero y más dinero.

Francia y los banqueros franceses, para envidia de Botín, son el ombligo del mundo económico, tienen a los americanos, a su banca y sus operaciones financieras en jaque.

Una de esas películas, entre regular y mala, donde el ser humano normal queda como idiota al no haberse dado cuenta de cómo nos manejan y cómo nos destruyen los Robin Hood de los ricos, según ellos mismos se nombran. (menuda tontá).

Las  conspiraciones, los malos malísimos y los tontos ciudadanos, sin fuste, "sin ná de ná". Podéis pasar la vida sin ella. Ah lo olvidaba y por medio, como para darle un toque casi humano al personaje, un enchochamiento del millonetis sin criterio y sin hondura, eso sí soltando un latigazo de puterío al mundo de las top model.
El otro paso por las mujeres de la película es la esposa, el típico roll de mujer medio tonta pero que bajo el paraguas del dinero y la posición se mantiene feliz. Triste visión de Costa Gavras del mundo femenino.
El actor tiene constantemente esa cara de asco que creo que no hace esfuerzos por tenerla es así.

En definitiva, una película francesa para los franceses.

El detalle: Secuencia donde el sastre le hace los nuevos trajes y él habla de dinero y más dinero, el sastre y el banquero nos asombran con un diálogo lleno de chispa y ocurrencia:
-¿De qué lado?
-Perdón
.¿De qué lado carga?
Y se la miran los dos. Menuda tontá. ¿O no?

Ojo que se presentó a la sección oficial en el festival de San Sebastián , hay que fastidiarse por no decir otras cosas.